En relación al tema de Chipre inquieta pensar que un país de la Eurozona pueda ser intervenido de esa forma. El fantasma de la salida "por la puerta atrás" de Chipre, y otros países del euro grupo para abandonarlos a su suerte está a la vuelta de la esquina. Se ha calculado el impacto económico que tendrá sobre ese país la reestructuración de su sistema financiero, la pérdida de puestos de trabajo y la fuga de capitales tras la aprobación del "Plan de Rescate". Este rescate no nos suena a rescate de Chipre sino a rescate alemán porque lo que se rescata realmente no es Chipre sino la confianza respecto del conjunto de la zona (la credibilidad y la fortaleza alemana frente a terceros), y ello a costa del débil. El agente económico en la zona euro, y en el resto del mundo a partir de ahora se va a preguntar ¿Cuales son las reglas del juego?...Atrás quedaron los principios del libre mercado donde los agentes reguladores tenían la misión de respetar y hacer respetar las reglas del juego, como árbitros moderadores, y todo se basaba en el sacrosanto principio de la libertad de juego entre la leyes de la oferta y la demanda, libre circulación de capitales y personas, libre competencia, se decía.
¿Alguien ha calculado el tiempo que pasará hasta que la economía Chipriota se recupere? Quizá eso no le importa a nadie mientras no le toque el "bolsillo". ¿Cómo se puede evaluar el impacto del Plan en la pérdida de credibilidad para el sistema afectado? Ya son muchos los reputados economistas que alzan sus voces para decir que "vendrán más a añadirse a la lista abierta por Chipre".
Es sólo una reflexión que os planteo.
Juanvi García
